No nos cabe la menor duda de que haces todo lo que crees posible por llevar una higiene dental adecuada. Ahora bien, ¿haces todo lo necesario para gozar de una boca completamente limpia? Tu cepillo de dientes ve a diario lo que haces y, si hablara, puede que te dijese un par de cosas que no sabías.
Lo primero, puede que te eche un poco de menos. El cepillado diario es fundamental en una boca saludable, eso está claro. Pero no basta con una sola vez al día —lo típico de antes de dormir—. Tu cepillo te pediría que fueses a visitarlo más a menudo. Al menos un par de veces al día. Y mejor, detrás de cada comida.
Otra de las cosas que te diría es que le faltan amigos. Una buena higiene bucal no es completa sin el uso de colutorios e hilo dental. Es suficiente con usarlos un vez al día.
Lo siguiente te lo gritaría a voces: ¡el sangrado no es normal! Tendemos a pensar que un poco de sangre al cepillarnos es algo normal. No lo es. Es frecuente, pero no es normal. Puede ser el aviso de enfermedades como la piorrea. Si esto ocurre, estamos seguro de que te diría que él no puede hacer nada por solucionarlo y que acudas a tu dentista. De hecho, si pudiese te recordaría un par de visitas al año, solo para comprobar que todo está bien.
No importa si tu cepillo es manual o eléctrico. Los dos te dirían que se puede llevar una higiene dental perfecta con ambos.
Ese necesario momento de la despedida. Un cepillo no es una relación duradera. Más bien es muy corta. Es necesario que te despidas de tus cerdas cada dos meses, ya que tienden a acumular bacterias que pueden ir en contra de tu higiene bucal.
Estamos seguros de que hemos ayudado a tu cepillo a estar más tranquilo. Y de que a partir de ahora tus hábitos serán más completos. Hazlo delante de él antes de despediros. ¡Que lo vea!
Y recuerda que en nuestras instalaciones hemos eliminado el miedo al dentista mediante la sedación consciente con óxido nitroso. ¡En Clínica Dental Imagen no hay dolor!